Constrúyase un cielo más bien cóncavo.
Píntese de verde o de café, colores terrestres y hermosos.
Salpíquese de nubes a discreción.
Cuelgue con cuidado una luna llena en occidente, digamos a tres cuartas sobre el horizonte respectivo.
Sobre oriente inicie, lentamente, el ascenso de un sol brillante y poderoso.
Reúna hombres y mujeres, hábleles despacio y con cariño, ellos empezarán a andar por sí solos.
Contemple con amor el mar.
Descanse el séptimo día.
Subcomandante Insurgente Marcos,
Feb. 26, 2004
Píntese de verde o de café, colores terrestres y hermosos.
Salpíquese de nubes a discreción.
Cuelgue con cuidado una luna llena en occidente, digamos a tres cuartas sobre el horizonte respectivo.
Sobre oriente inicie, lentamente, el ascenso de un sol brillante y poderoso.
Reúna hombres y mujeres, hábleles despacio y con cariño, ellos empezarán a andar por sí solos.
Contemple con amor el mar.
Descanse el séptimo día.
Subcomandante Insurgente Marcos,
Feb. 26, 2004
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