martes, 27 de marzo de 2007

Mahatma Gandhi


Yo deseo que los millones de personas de nuestra tierra sean sanos y felices y los quiero ver crecer espiritualmente... Si sentimos la necesidad de tener máquinas, sin duda las tendremos. Toda máquina que ayuda a un individuo tiene justificado lugar, pero no debiera haber sitio alguno para máquinas que concentran el poder en las manos de unos pocos y tornan a los muchos en meros cuidadores de máquinas, si es que éstas no los dejan antes sin trabajo...
Mahatma Gandhi

lunes, 26 de marzo de 2007

... me bebí el sol... Eduardo Gallegos Mancera

Ilustración: Héctor Poleo



Me bebí el sol

me bebí la luna,

Jupiter se me escapó

a duras penas

y Saturno fugitivo

me dejó sus anillos

entre los dedos

Todo un año luz

estuve

cazando

en los cotos del cielo

y ahora estiy aquí,

en la Tierra,

suspirando por un átomo

cualquiera

que me brinda su lumbre

para encender luceros.


Eduardo Gallegos Mancera

sábado, 24 de marzo de 2007

Palabras sueltas

Ilustración: Oswaldo Guayasamín

Palabras sueltas, quizás sin sentido e incoherentes, están en mi mente.

Hoy estoy aquí sentada, esperando, no se que
No quiero hablar no quiero escuchar,
Hoy pienso que no hay tiempo ya
Hoy me desespero y lo veo pasar
Hoy mi cuerpo se estremece al oler tan de cerca
El enemigo entre mis caminos
Sin temor avanza y nos acecha
Pero mi tristeza me embarga, estoy impotente
Me siento desarmada.
Hoy estoy aquí desplomada, abismada.

Por un momento no soporté
Y dejé que mi sentimiento aflorara
Y peque, al no poderme controlar
No pude callar y deje mi grito escapar
Muchos dicen no era así
Pero no pude callar, mi grito se ahogaba
Quizás fue un error pero algo se amontonaba
En mi pecho, y tenia que salir.

Creo que no soportaré
Más hipocresía
El mundo en el que suelo soñar es irreal
Quizás por eso he sido ingenua
He querido confiar en mí
Y he vuelto a fallar, ni siquiera en mi sombra
He debido confiar.

No quise llamarte
No tenia nada bonito
Para compartir
Quise mejor escribirte
Mi desdicha
Mi desden

No me juzgues
No trates de interpretar
No le des vuelta a mis palabras
Soy yo en este instante
Quizás mañana
No sea igual.

Tampoco preguntes
Un porque, quizás no
Podría explicar
Escribo por no poder
Hablar.

Morelia Lira Ochoa

lunes, 19 de marzo de 2007

Sólo le pido a Dios

Sólo le pido a Dios
que el dolor no me sea indiferente,
que la reseca muerte no me encuentre
vacío y solo sin haber hecho lo suficiente.

Sólo le pido a Dios
que lo injusto no me sea indiferente,
que no me abofeteen la otra mejilla
después que una garra me arañó esta suerte.

Sólo le pido a Dios
que la guerra no me sea indiferente,
es un monstruo grande y pisa fuerte
toda la pobre inocencia de la gente.

Sólo le pido a Dios
que el engaño no me sea indiferente
si un traidor puede más que unos cuantos,
que esos cuantos no lo olviden fácilmente.

Sólo le pido a Dios
que el futuro no me sea indiferente,
desahuciado está el que tiene que marchar
a vivir una cultura diferente.

León Gieco





Descargar el disco Desenchufado de León Gieco
Aquí

jueves, 8 de marzo de 2007

América desnuda - Samuel Eduardo Quenza


Yo imagino la América desnuda,
-erótica es su armazón telúrica-
erótico el perfil de sus pezones
manando la fría leche de los páramos.
eróticas sus venas: Amazonas,
Plata, Orinoco, Paraná, Río Bravo,
(Eva escapada a algún Demián imberbe)

América es la hembra que idealizo
unas veces tendida la verde grama del estero,
otras más, empinada,
afincada en sus dedos que hunden sus mil samanes
en el océano oculto donde flota
su cuerpo, florecido y floreciente,
y otras veces montado en una danta
donde sin taparrabos cabalga la leyenda.

América es así:
¡Naturaleza!
No con rostro de nieve, sí de piedra,
no con voz de jilguero, sí de trueno,
no con sexo de mula como quieren
los que su savia maternal pretenden detener.
No con húmedo cuerpo de paloma
y sí con trepidente
arquitectura feroz y femenina de pantera.
No con luz de luciérnaga en los ojos
sino con mil relámpagos de estrellas.
América extendida para entrega
que ha de fructificar en raza nueva.
Pero América erguida
con un lucero al norte de su rumbo
en vez de aquella mano levantada
como de libertad enmascarada
que si no se calcina se congela.
América con niños que sean niños,
sin aquel santa claus de los que tienen
todavía prohibida la emoción de la flecha,
la angustia del tambor,
el placer del torrente,
porque son colibríes encerrados
en bonita hosca jaula de quimeras.

Pero mi bella América desnuda
que fue vírgen y novia, angelical y tierna,
que es la de quetzacoalt ala del mito
está en el gran día de esta era
amanecida ya en mujer,
su himen se le ha vuelto torrentera
desde Cauthemoc,
Desde Paramaconi,
desde Tupac Amaru,
desde Caupolicán el Araucano,
desde el negro Miguel,
desde Chirinos,
desde Hidalgo y Morelos,
San Martín y Bolívar,
Miranda, Sucre, Girardot, Martí,
y todos ellos…

Y desde el gran Sandino
que ayer dobló su tallo para soltar semillas.
y desde aquel Camilo colombiano
con que Cristo se vino hasta mi Tierra.
desde el Che de la Pampa
que fue a la Sierra Maestra
para volver de allá a hacerse símbolo
cerca de donde estuvo Tiahuanaco.
Y de los que como ellos
la han preñado de veras
porque aquí está el futuro:
el Adán de esta Eva.
Hoy me siento como ellos los varones
como ustedes se sienten,
porque somos los hombres
los mestizos
los que nacimos del encuentro
de la cruz, del tambor y la flecha.

Yo imagino la América desnuda.
¡Que bella es
y que tierna
y cómo le palpita el corazón,
aunque con oro se lo quieran petrificar
los que no la comprenden!
Hace falta más fuerza,
más vigor,
más sudor
y más sangre
¡Para que para América!

lunes, 5 de marzo de 2007

Tus manos son de viento - Eva Ayllon

Yo quiero que el hombre no muera
de hambre, de odio, de olvido
no quiero que haga la guerra
yo quiero que llene sus manos
con agua del cielo
y luz de verano
Yo quiero que el hombre sonría
le cante a la sal de los días
llevarían sus manos de viento
al surco de tierras baldías
que salga al camino de atrás de la vida
Ven vamos a hacer un mundo nuevo
con la juventud de la mañana
es un arco iris este sueno
la mas bella flor de mi ventana
Vamos que ya va llegando el día
que hay que engalanar las casas viejas
toda la comarca es una fiesta
saludando al mar con melodía
Vamos mi amigo
Vamos sembrando el camino
Vamos mi hermano
el camino esta esperando
Vamos mi amigo
vamos sembrando, sembrando
vamos mi hermano
vamos cantando, cantando
Tus manos son de viento
tus manos son de amigo

Daniel Kiri Escobar


Descargar Eva Ayllón 30 Años
Disco 1
Disco 2

viernes, 2 de marzo de 2007

Leyenda sobre el origen del libro “Tao Te King” dictado por Lao-Tse en el camino de la emigración - Bertolt Bretch


A los setenta años, ya achacoso
sintió el maestro una gran ansia de paz.
moría la bondad en el país
y se iba haciendo fuerte la maldad.
Se abrochó los zapatos.

Empaquetó las cosas necesarias.
Pocas. Pero algo había que llevar.
La pipa en que fumaba cada noche.
El libro que leía a todas horas.
Algo de blanco pan.

Gozó mirando el valle, y lo olvidó
cuando la senda comenzó a ascender.
Rumiaba el buey, alegre, hierba fresca
mientras llevaba al viejo,
pues iba muy de prisa para él.

Caminó cuatro días entre peñas
hasta que un aduanero lo paró.
“¿Alguna cosa de valor?” “Ninguna”
“Es un maestro” dijo el joven guía
del buey. Y el aduanero comprendió.

Y el hombre, en un impulso afectuoso
aun preguntó: “¿Qué ha llegado a saber?”
Y el muchacho explicó: “Que el agua blanda
Hasta a la piedra dura acaba por vencer.
Lo duro pierde”

Aprovechando aquel atardecer,
tiró el guía del buey, siguiendo viaje.
Ya se perdían tras de un pino negro
cuando los alcanzó el buen aduanero,
les gritaba: “¡Esperádme¡”
“Dime otra vez eso del agua, anciano”
Se detuvo el maestro: “¿Te interesa?”
“Soy sólo un aduanero”, dijo el hombre,
“pero quiero saber quien vencerá.
Si tu lo sabes dímelo.

¡Escríbemelo! ¡Díctalo a este niño!
no lo reserves sólo para ti,
en casa te daré tinta y papel
y también de cenar. Yo vivo allí.
¿Aceptas mi propuesta?

Examinó el anciano al aduanero:
chaqueta remendada, sin zapatos,
viejo antes de llegar a la vejez.
No era precisamente un triunfador.
Murmuró: “¿Tú también?”

Había vivido demasiado para
no aceptar tan amable invitación.
“Quien pregunta merece una respuesta.
Parémonos aquí” dijo en voz alta.
“Hace ya frío”, el guía le apoyo.

Echó pie a tierra el sabio de su buey.
Escribieron durante siete días
alimentados por el aduanero.
Quien maldecía ahora en voz muy baja
a los contrabandistas.

Una mañana, al fin, ochenta y una
sentencias dió el muchacho al aduanero.
Y, agradeciéndole un pequeño don,
se perdieron tras el pino negro.
No es fácil encontrar tanta atención.

No celebremos, pues, tan sólo al sabio
cuyo nombre en el libro resplandece.
Al sabio hay que arrancarle su saber.
Al aduanero que se lo pidió
Demos gracias también.

jueves, 1 de marzo de 2007

Silvio y Chávez

Canto al Hombre - Luis Luksic

Libertad - Millor Fernandez



La libertad existe. No sólo existe sino que además está hecha de concreto y acero y tiene cien metros de altura. Fue donada por los franceses a los norteamericanos en 1886 porque en aquella época los franceses tenían demasiada y los norteamericanos muy poca. Habiéndola recibido de los franceses, los norteamericanos la colocaron en la isla de Bodloe, a la entrada del puerto de Nueva York. Nunca entró completamente en los Estados Unidos.

Expulsada de todas partes, viviendo siempre hambrienta, teniendo que subsistir sin residencia fija, apuñalada aquí, estrangulada allá, no deseada en verdad por nadie, a no ser por unos pocos y locos humanistas y revolucionarios a través de la historia, es ridículo representarse a la libertad como una mujer hermosa con una antorcha eternamente encendida en la mano, con rasgos delicados y una expresión serena y altiva.
La libertad es un perro vagabundo.